domingo, 30 de septiembre de 2012

La letra



Solo un segundo
un segundo nada más
NECESITO escupir una letra
y con ella
firmar mi renuncia
a esta sociedad tan mierda
que se pudre entre placentas
que podridas acrecientan
la sobrepoblación

Solo quiero escupir una letra
sangrar en la vocal
y agonizar en la palabra

Hoy no estoy en la nada
porque si esto fuera la nada
no habría nada por escribir
y hoy tengo la vena inflamada
cargada con tinta que amenaza a manchar la obsoleta estructura del sistema
que amenaza
con inundar oídos y orejas, ojos, labios, lengua, garganta, ombligo, corazón, conciencia.

Quiero escupir una letra
con mi sangre opulenta
que derrama del caudal que acechan los vampiros.






martes, 25 de septiembre de 2012

la mierda*



En la mirada al pasado
Sobrevive la rebeldía
Del sentimiento añejado
En el revoloteo de la libertad
Que reina entre las almas que protestan
Ante los sistemas regulatorios
Que minimizan las vidas a cuadrados pequeños
Pequeños como las televisiones o los sets de rodajes
De películas tontas
O las grabaciones de las cámaras de seguridad de los bancos


El pasado ha evolucionado
Ha tomado un proceso menor al pronóstico del olvido
Después de la masacre
Los imperios reinan
En la cúspide de sus empresas
Mineras/ bananeras/ petroleras/ cafetaleras/ hidroeléctricas para lavarse el corazón

Sigue siendo la misma mierda…
Y yo me pregunto si:
¿La mierda evoluciona antes que nosotros?
O ¿nosotros evolucionamos en dirección hacia la mierda?

Sentada a la izquierda de la mierda
A la derecha
En el centro
Por todos lados
Protesto con arrogancia
A este egocentrismo tan hijo de puta
A este individualismo tan indiferente
Que nos tiene comiendo
De la mierda

Sostengo mi verdad con claridad en mi conciencia
Más aun soy prisionera
De este pulpo gigantesco que se chupa las ciudades y la tierra

Será bueno salir un día de la casa con todos los papeles
Y quemarlos mientras navegamos en un barco hacia el fin del mar.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Porcelana fría



Lloro en la masa
Al sudar con mis manos
Acaricio las formas
Transgredo la tridimensionalidad
Y me derrito en la esencia

Deforme la materia
Se me pega entre los dedos
Implorándole a mis manos
Moldear su existencia
Hacer de ella
Una gota de lluvia
Un carrusel oxidado
Una montaña alta
Un sol
Una espiral
Una sirena que sale de las piernas de una mujer mulata
O una tabla de madera que me salve de la corriente enfurecida

La masa busca en mí la forma
Y yo su posibilidad infinita.

martes, 18 de septiembre de 2012

Grandes olas nocturnas



Lloverán olas nocturnas
Y el tsunami nos sorprenderá durmiendo desnudos
La corriente nos llevara sin percatarnos
El agua con furia nos arrastrara
Con nuestra chatarra por delante

Nosotros despertaremos
Entre tanta basura que creíamos todo y ahora es tan diminuta
Lloraremos ahogados
Con nuestro propio llanto
Con nuestra propia saliva
Y nuestra propia mierda

Imploraremos a la naturaleza cesar las aguas
Y devolvernos a casa

Sabemos ya
Que la puerta estará cerrada
La ventana tal ves abierta
Y la cortina seguramente abajo…
No seremos bienvenidos de vuelta
Tendremos que conquistar el espacio

domingo, 16 de septiembre de 2012

Necesito empleo

Hoy fue un día valiente
No intente esquivar las avalanchas de sal


Simplemente no vinieron

Vinieron sueños violadores
Cartas mal escritas
Correos electronicos con archivos adjuntos
Que eran imágenes de vos y tu ex novia cogiendo en el cajón

El hambre tampoco amenazo tan fuerte en la mañana
Por la tarde le di rienda suelta a mi mano
Y me extirpé el clítoris entre los dedos

Por suerte todo fue un sueño
Detrás de un orgasmo añejado
Desperté
Y el clítoris sigue pulsando

Sobreviví a la peste de los domingos
Con un par de heridas en la garganta 
Y una sobredosis de palabras 
Que exijen papel

La noche luce prometedora 
Con su vestido de letras
Pero no logra despistarme
Mañana es lunes y así los días comenzaran a desenterrarse

El futuro existe
Despierta el sonido de las cajas registradoras en mi mente…
Necesito
Conseguir un empleo.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Yo escucho el sonido del encendedor


(Sonido de encendedor tres veces)

De nuevo yo
Llenadome la garganta
De esta soledad vacía
Que espero me vacíe
Hasta agotar mí sangre

(Sonido de encendedor tres veces)

De nuevo yo
Cohibida después de ser agua
Con los ojos desgarrados por cristales que no lograron fluir
Corriente abajo
Se deslizo la sal
Y ardió la piel

(Sonido de encendedor tres veces/ sonido abejas)

Me siento congelada
Como una estatuilla salada
Parada a la par de un panal que calcina millones de abejas
Dulcemente

(Sonido de encendedor tres veces/ sonido abejas)

Se abre la puerta dibujada en mi vientre
Tengo la esperanza de salir
De escapar de la piedra
Y resucitar en la miel
Pero no sale nada
De lo que creía
Vivo por dentro

(Sonido de televisores/ sonido abejas)

Soy yo
Se asoman las multitudes
He sobrevivido
Existo
Las abejas existen
Las siento encima
Comiendo de mí
Quiero salir
Ya no aguanto
Soy miel
Soy semilla
Soy estatua
Sal
Y tormenta

Atardeciendo

Te espere toda la tarde, sentada en la ventana con las piernas abiertas, creí que si veías al sol entre mis piernas, a un par de cuadras de distancia, vendrías sedienta por querer atardecerlo entre tus labios. Así paso una hora y dos más tarde y tres después, comienzo a acostumbrarme a que vos sos la persona mas lenta y que ni porque tenga una bomba en el ombligo vendrías sin demorar. Continua la espera, prefiero cerrar las piernas pues el airecito amenaza con ganarte la batalla y yo quiero estallar encima de vos como si no lo hubiera hecho nunca. Me pierdo entre nubes, montañas y edificios, desde este décimo piso la vida se mira diferente. De pronto aparece tu delgada silueta jugando con la sombra que rebota sobre la calle, yo me pongo tensa, aprieto un poco más y se me sale una gota. Espero sentada hasta que suena el timbre, corro hacia la puerta, abro y salto directo a tu boca, te beso lento porque tengo una eternidad sin hacerlo y quiero sentir como tu lengua se introduce en mi boca, me gusta sentir tu plenitud, que estas desbordándote a tus anchas dentro de mi.

Caminamos por la sala, no puedo quitar mis manos de tu cuello, de tus hombros, de tu pecho, nos olfateamos como dos fieras enternecidas por el olor a carne sangrienta y jugosa. Te siento sobre la silla, frente a la ventana, me poso encima de vos, una pierna de cada lado, estas atrapada en mi telaraña por hoy. Huelo tu cara, me encanta hacerlo, cerca de las orejas oles tan rico que me derrito y vos lo sentís. Sonreís tierna, agarras mi cintura, me miras con esos ojos verdes que saben que soy tuya, te acercas a mi boca y nuestro remolino explota, somos el universo, el océano en nuestras bocas, rebotan las cuevas en nuestras caderas al ritmo del corazón. La tela se desvanece, cae fuera de nuestra piel, entonces nos encontramos vos y yo, como siempre, reflejadas en el espejo de la carne, te acaricio al borde de tu singularidad y me derramo, espesa cae la gota sobre tu pierna como cuando se siembra una flor. Vos sos el desierto, desde que te fuiste ya no existen las flores y arden sobre tu piel las gotas de primavera.

No voy a desconcentrarme, la tormenta quedo en el pasado y las sirenas chapotean sus colas en nuestras lenguas incitándonos a bajar. En mis algas te envuelvo y las tuyas renacen dentro de mí, agarras mis nalgas con fuerza, haciéndome bajar, haciéndome abrir, te sentís dentro de mi y te volves loca, yo me prendo de tu oreja, se estrellan nuestros pezones y sacamos chispas de placer, tu boca comienza a buscarme, a encontrar dentro de mi a la vieja madre que se pudrió en otras vidas, mamas de mis tetas como queriendo ahogarte, yo me erizo y grito al sentirme en el borde de tu garganta, en el precipicio de tu inmensidad. Te detengo, pongo brazos de distancia y sonrío como quien ya conoce el paraíso sin necesidad de esperar a la muerte.

Me meneo al vaivén de las olas que hierven mis óvulos y comienzo a subir a bajar, dejando al aire colarse entre tu clítoris y mi vagina. Vos saltas como un delfín que agoniza para entrar a la cueva más bella del mundo, yo te rescato, sostengo tu torso entre mis brazos, juntos nuestros corazones, el tambor rebota tras nuestra piel. Revolotean mariposas, se abren las rosas, el rocío comienza a descender. Me recuesto en tus pechos, pequeños luceros que algún día fueron estrellas y me abro mas y mas y mas, vos me posees con tus manos incrustadas en mis caderas, me moves una y otra vez sin parar como si cavaras un túnel despacio dentro de mi.

El sol comienza atardecer y vos me volteas bruscamente hacia la ventana, yo me agacho intentando alinear al sol entre mis labios para vos, entonces me nalgueas, me tocas, me agarras fuerte de las caderas y me dejas caer encima de vos, como el tallo en la rosa entras dentro de mi, sintiéndonos inmensas una en la otra, me prometes al oído mas que la media noche, yo me derrito sobre vos mientras siento tu fuerza, tu clítoris palpita dentro de mi, el mío responde con un grito que revienta las ventanas y me hace volar, me eleva hasta donde el cielo finaliza y no existe mas, me dejas caer una y otra vez hasta que nuestros corazones se paralizan en medio del océano que se desbordo en la silla, en la ventana, en el piso, en el corazón… en nuestra existencia.